02.10.2011
Es septiembre diez, solo el sonido del teléfono roto, solo cuestiones de lo inconcebible... No creas que el mal es uniforme en todas partes, es inútil abrir un paréntesis que pueda llevar a la incertidumbre, ¿quién dice en esta morada del bien, por qué hablabas del mal? No querías hacerlo, y todo se convierte en una constante embarazosa, siempre son las mismas personas. Yo de un lado, tú del otro, no se sabía que era solo una pertenencia en la vida, no se había aprendido que la palabra "vida" se refiere a la cuestión primaria del aire atrapado en el cuerpo.
¿Qué está censurado hoy? Por ejemplo, ¿puedes decirme qué esperar? Mientras las mismas posiciones en el terreno del mal siguen surgiendo, parece que yo soy tú y viceversa, cuántas cosas no se dicen hoy o cosas similares. Ahora o más tarde percibirás el futuro que es ahora, en otras palabras, qué estará contiguo a un discurso real, moderno, electrónico, informático, software... mira un reloj y comprenderás, tu famosa interrupción social se hace fácil aquí, es donde estás, vale, no te interrumpas... de hecho, las dudas sobre el dinero, el coche, la existencia del mal serán reales, el mar de mañana y quiénes somos, pero realmente.
¿Recuerdas lo que querías decir... parece que todo está ya resuelto, a veces no hace falta hacer o decir nada, ¡existir, existes! Y cuántas innumerables cosas no se han hecho, quieres vivir en América, vuelve a casa por favor. Temas cotidianos, personas aún muy perturbadas, "muy" es un adjetivo, esos virus humanos serán tus asuntos. Será o no será, queridos... las disfunciones o los cuernos, en siciliano, no son reconocidos entre los vivos, claro, es mejor atacar a los supervivientes del planeta.
¿Has visto el Estado hoy, devorador de energía, que parece un loco? La fuerza bruta de quien no sabía se ha convertido en un asesinato real, incluso de un abogado, aunque un poco distraído y frío. Lo cotidiano, quién o qué continúa, continúa. Era el fin, pero se habrá vuelto pasado, ahora vuelve a empezar, pero parece que nada se ha resuelto. Se cree firmemente qué es el poder o qué es el dolor, pero era el futuro en lugar del pasado. Un Estado presente apagado sigue siendo una tragedia, un drama, un instituto en el que el día no debería ser.
Nuestros silencios o los males de hoy, descubriremos nuestros pecados un día. Ahora qué se ha convertido el cielo. Las flores se marchitarán también este año, porque no era yo, no eras tú, sino nuestra época que traza una flecha. Continúa, verás un gran muro delante, ahora regresa donde estabas antes, donde huirán los soberanos de hoy, si no en un pequeño bolsillo... ese muro no era imaginario para todos, pero leyendo los periódicos y hojeando la nada organizada, parecerá necesario parecerse al vacío o aprender a digerir el fascismo.
Descansa donde no existe la nieve, qué dulce domingo. Hago un salto de línea para transmitir el significado del momento, entre los muchos que este año o este fin de semana representa, en este hermoso y grácil domingo, contra el falso fascista, aniquilando al decir quien no nos atrevemos a nombrar, comienza como una bendición incluso contra quien podría ser un poco asesino. Queridos, una vez vivíamos... para enfrentar el futuro o para preceder quién sabe qué queríamos.
La niebla ni siquiera se consideraba, pero todas las personas estaban y están aquí, o no están en otro lugar que no sea su hogar, presentes en economía, en una interioridad existencial. ¿Te sientes parte de una clase gentil o una planta verde... parece ser un proceso de autoeliminación también de los días, o una de las mayores revoluciones sociales ocultas, parece que el aire, después de una interrupción, se vuelve como un error, pero la poesía engañosa es solo silencio.
El dinero como la sangre debe alcanzarnos, y es terrible ver cómo las personas resbalan lentamente hacia abajo, otras expresiones nos sonríen, y luego caen, en lo más profundo de cada uno de nosotros, o en sus silencios, mira cómo mueren los males de quienes no querían hablar, el vacío o la nada en sus ojos, ¿dónde están los demás, la civilización, sus ocupaciones parsimoniosas, ahora están solos y lloran, vaya, digo que la verdad brilla intensamente de día, la semana pasada en el trabajo, la sangre junto con el dinero, la gasolina.
¿Cuál es el verdadero tema de hoy? ¡El vacío! El semáforo está en rojo... ah, mi semáforo pero mira, tal vez indicaba tu rojo o el teléfono aún roto el año pasado... tienes hambre, el jefe no habla de los estados de ánimo, veo muchas dudas ya resueltas delante de mí, pero de tu alma biónica nadie habla.
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